El fotoperiodismo y la producción audiovisual: herramientas para contar historias a través de la imagen

Descubre cómo el poder de la imagen puede trascender las palabras en el Laboratorio de Periodismo Cultural de Cuatro Palabras. Acompaña a los participantes mientras exploran el arte del fotoperiodismo y la producción audiovisual, y cómo estas herramientas se convierten en un medio para contar historias que impactan profundamente. En las calles de La Candelaria, las imágenes cobran vida y dan voz a esta comunidad única.

Bajo la guía de Charlyn Rivero, en la segunda jornada del proyecto de Periodismo Comunitario, los participantes exploraron la poderosa herramienta del fotoperiodismo y la producción audiovisual para contar historias que trascienden las palabras. Estas técnicas no solo capturan momentos, sino que también encapsulan emociones, narrativas y realidades, permitiendo que las imágenes hablen por sí mismas.

El fotoperiodismo es una forma de periodismo que busca comunicar y representar acontecimientos y noticias a través de imágenes y fotografías. Su enfoque principal es la actualidad relevante, aunque va más allá de la noticia en el sentido tradicional. Las imágenes en el fotoperiodismo no solo capturan eventos, sino que también se esfuerzan por transmitir la esencia de una realidad, un contexto y las personas que la habitan, independientemente de si son o no noticias en ese momento.

Por su parte, la producción audiovisual se presenta como el arte de crear contenido en forma de audio, video o ambos, destinado a ser transmitido en diversas plataformas. Esto puede incluir medios de comunicación masiva, como la radio y la televisión, así como plataformas digitales y redes sociales. La producción audiovisual es una herramienta poderosa para compartir historias de manera efectiva, ya que combina elementos visuales y auditivos que pueden impactar profundamente a la audiencia.

En el corazón del fotoperiodismo y la producción audiovisual se encuentran las técnicas de composición. Estas técnicas son el lenguaje de la imagen, la forma en que los fotógrafos y cineastas transmiten sus mensajes. 

A su vez, los ángulos fotográficos son esenciales para dar forma a la historia que se cuenta a través de la imagen. Cada ángulo ofrece una perspectiva única y puede influir en cómo percibimos a los sujetos en la fotografía.

Estos aprendizajes no son solo técnicas, son la llave para desbloquear el poder de la narración visual. En el Laboratorio de Periodismo Cultural, los participantes descubrieron que, a través de la fotografía y el audiovisual, pueden capturar la esencia de su comunidad, compartir sus experiencias y emociones, y contar historias que dejen una impresión duradera en quienes las ven. Las imágenes y los videos pueden transmitir realidades complejas, inspirar cambios y dar voz a las personas y a las comunidades, fortaleciendo la capacidad de contar historias que realmente importan. Estas herramientas pueden ser utilizadas para visibilizar desafíos, celebrar la diversidad cultural y promover un cambio significativo.

Al finalizar el taller, los participantes pasaron de aprender las técnicas del fotoperiodismo y la producción audiovisual en el aula a aplicarlas en el vibrante barrio de La Candelaria. Fue un ejercicio que trascendió las cuatro paredes de un salón de clases y llevó a los participantes a recorrer las calles de este icónico lugar, para conocer su esencia, su gente y, sobre todo, para capturar sus historias únicas.

Mientras deambulábamos por las estrechas calles empedradas, los participantes se sumergieron en el corazón de La Candelaria. Descubrieron el alma de este barrio que late con la fuerza de siglos de historia, y se encontraron con su gente, cuyas historias han sido moldeadas por los altibajos de la vida en este rincón de Cartagena. Cada rincón y cada esquina se convirtieron en lienzos en blanco, listos para contar historias visuales.

Con sus cámaras y equipos de grabación en mano, los participantes se convirtieron en narradores visuales. Cada paso que daban era una oportunidad para capturar la esencia de La Candelaria: desde los colores vivos de las fachadas hasta los rostros amigables de los vecinos. Con la guía de las técnicas de composición aprendidas, pudieron dotar a sus imágenes de una profundidad y emoción que trascendió lo meramente estético.

La verdadera magia de este ejercicio fue la capacidad de los participantes para revelar las historias no contadas de La Candelaria. Detrás de cada imagen se encontraba una narrativa: las luchas y alegrías de los habitantes, la resiliencia de una comunidad frente a los desafíos, la riqueza de una cultura que se muestra en los detalles cotidianos. A través de sus lentes, los participantes dieron voz a estas historias no contadas.

Al final de la jornada, las fotografías y videos capturados contaron historias poderosas. Historias de un barrio que late con vida, que alberga una riqueza cultural inmensurable y que enfrenta desafíos con valentía. Los participantes se dieron cuenta de que las imágenes pueden ser una ventana hacia el alma de una comunidad, una puerta que se abre para revelar su esencia.

Emilio Cabarcas

Comunicador social y periodista. CEO y Fundador de Cuatro Palabras. Experto en periodismo comunitario y desarrollo de iniciativas de innovación social.

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